jueves, 30 de abril de 2020

EN LA NOCHE


Cuando la luna tu palio ilumina
y ya bajo él tu faz la luz la dora,
perla de una lágrima va y declina
sobre tu cara bella y redentora. 

El sonido de un rezo se avecina 
de un corazón baezano el cual te adora,
y el pálpito de un beso se adivina
cuando tu corazón bajo el bullicio:
aflora 

¡Oh corazón de Madre! Luz piadosa, 
cuando Tú vas por las calles de Baeza.
Haces de mi ciudad la más hermosa.

Pues la viste de amor: tan Dolorosa,
conjunto de bondad y de grandeza
como madre de Dios ¡Oh Fervorosa!

Antonio Cabrera Lechuga 
Baeza, Abril de 1973